Oh quien me honrara a mi con una mueca de manzana!
quien ahora que suena el reloj tan fuerte y tan semilento, semirapido
Zapallasos los que deseaba conocer entre tanta mugre, cogerlos en la calle vaciarlos desde adentro
perdonenme a mi que estoy callando, o felicitenme por dorarles las cabezas!
me cuesta digerir esta mentira, o el acantilado que a la piel mutila
¿Dorar cabezas o acabar muerta?
Nadie reza muy bien en esta corte...
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